Traición de la inocencia - Amar a los demás significa condenar el pecado | El Mundo de Mañana

Traición de la inocencia - Amar a los demás significa condenar el pecado

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Hay un espíritu malévolo responsable de la invasión de maldad en barrios y naciones, y constantemente está reclutando nuevas víctimas. No hay ninguna duda, cuando las noticias de la noche muestran hombres vestidos de mujer, con extraños disfraces de payaso, actuando delante de niños pequeños y de muchos de sus padres en actividades escolares. Estos supuestos actores desviados hacen cabriolas con giros sexuales lascivos, mientras cantan o pronuncian letras obscenas e insinuaciones sexuales, ¡delante de niños que aún no han cumplido los diez años!

Estos llamados drag queens, hombres vestidos de mujer, se han aprovechado de una amplia interpretación de las leyes de derechos civiles, que permiten lo que antes se consideraba comportamientos sexuales antinaturales, e introducen agresivamente en escuelas públicas, bibliotecas y actividades extraescolares; su programa de perversión normalizada. Y su objetivo son los niños pequeños. En tanto que la pornografía infantil y la pedofilia son delitos penales sujetos a juicio, los practicantes del travestismo se están imponiendo. La comunidad LGBT, mediante incesantes litigios, ha presionado para que se aplique el todo es válido, amenazando a menudo a funcionarios públicos y administradores escolares.

Cada vez más personas están aceptando este tipo de entretenimiento sexualizado. El New York Times informó recientemente que “los recitales de drag queen en bibliotecas han ganado popularidad como forma de entretener a los niños, al tiempo que se enseña la inclusividad” (21 de noviembre del 2022). Mientras la explotación sexual hace estragos, se extiende a un ritmo alarmante la disforia de género, o profunda sensación de incomodidad y aflicción que puede ocurrir cuando el sexo biológico no coincide con la identidad de género.

Elegir identificarse con un sexo distinto al biológico es una nueva tendencia en los países desarrollados. La presión de los compañeros, y el deseo de aceptación, llevan a muchos niños a seguir esta peligrosa moda. Importantes centros médicos están obteniendo grandes ganancias, administrando tratamientos hormonales y practicando cirugías de reasignación sexual a los niños. Sorprendentemente, algunos padres, influidos por psicólogos o médicos, aprueban esta farsa. Los resultados suelen ser devastadores para los niños cuando maduran, y se dan cuenta del trágico error.

El camino de Dios protege

Mientras que los legisladores, los círculos académicos y los tribunales; pueden sentirse intimidados por el espíritu malévolo que actúa por medio de esos movimientos, la Palabra de Dios clara y autorizada los condena. La Santa Biblia afirma claramente: “No vestirá la mujer traje de hombre, ni el hombre vestirá ropa de mujer, porque abominación es al eterno tu Dios cualquiera que esto hace” (Deuteronomio 22:5). El profeta Isaías fue inspirado para escribir: “¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!” (Isaías 5:20).

En el Nuevo Testamento, vemos a los dirigentes religiosos sorprendidos con Jesús por sus enseñanzas: “Se admiraban de su doctrina, porque su palabra era con autoridad” (Lucas 4:32). En cuanto al sexo humano, Jesús les dijo: “¿No habéis leído que el que los hizo al principio, varón y hembra los hizo?” (Mateo 19:4). Aquí no hay confusión.

Las Escrituras revelan el amor piadoso y la preocupación de Jesucristo por los niños. Cuando le trajeron niños pequeños, algunos discípulos protestaron, pero Él les dijo: “Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el Reino de Dios” (Lucas 18:16). Jesús explicó que podemos aprender de los niños pequeños: “De cierto os digo, que el que no recibe el Reino de Dios como un niño, no entrará en él” (v. 17). En otro lugar, proclamó: “De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el Reino de los Cielos… Y cualquiera que haga tropezar a alguno de estos pequeños que creen en mí, mejor le fuera que se le colgase al cuello una piedra de molino de asno, y que se le hundiese en lo profundo del mar” (Mateo 18:3, 6).

Jesús simplemente estaba recordando la instrucción dada por medio del profeta Isaías: “Clama a voz en cuello, no te detengas, alza tu voz como trompeta, y anuncia a mi pueblo su rebelión” (Isaías 58:1). Se puede condenar el pecado y, sin embargo, preocuparse amorosamente por el pecador. Jesús exhortó: “Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete” (Apocalipsis 3:19).

Esperamos con ilusión el Reino de Dios, cuando ya no se traicionará la inocencia de los niños pequeños. Para saber más sobre el inminente Reino de Dios, solicite un ejemplar gratuito de nuestro folleto: El maravilloso mundo de mañana. ¿Cómo será? O puede leerlo en línea ingresando a nuestro sitio en la red: www.elmundodemanana.org.