¡No más guerras!

El sufrimiento está siempre presente en la condición humana. En la nación de Yemen, desgarrada por la guerra y el hambre, los padres y los niños conocen los efectos de la guerra en detalle. ¡El cólera y el decaimiento del sistema de salud están afectando especialmente a los niños! “Con la baja inmunidad, mala nutrición y condiciones de vida insalubres, estos niños están sentados en la cúspide de las infecciones y enfermedades. El colapso del sistema de salud, en el cual a los médicos no se les paga y los suministros médicos básicos están en extrema escasez, empeoran las cosas” (UNICEF, 23 de junio de 2017). Los padres que no pueden pagar el tratamiento de sus hijos o no tienen acceso a la atención médica se ven forzados a ver a sus bebés y niños morir. El país también enfrenta una escasez de agua potable y suministros médicos, lo que empeora la situación (ibídem). La guerra y el sufrimiento son el resultado final de las sociedades mundiales controladas por un poderoso espíritu conocido como “el dios de este siglo”, Satanás el diablo (2 Corintios 4:4). Pero la guerra y el sufrimiento no siempre existirán. Vendrá el día en que no habrán más guerras (Isaías 2:3-4, Apocalipsis 21: 4). Para más información sobre un mundo sin guerra, lean o escuchen “¿El fin de las guerras?”