Una nueva investigación de la Universidad de Toronto Mississauga advierte: "Los seres humanos pueden estar afectando el desarrollo de los animales [adaptación] en una escala sin precedentes como resultado de una urbanización generalizada" (IB Times, 3 de noviembre de 2017). "Muchas especies, como las ratas, las cucarachas, las palomas y las (los) chinches han llegado a depender de los humanos y se han proliferado como consecuencia.