Tifón inunda Tokio

El tifón Halong "el sábado azotó a Japón mientras el país se preparaba para el inicio de un periodo nacional de vacaciones, haciendo que las autoridades ordenaran la evacuación de medio millón de personas que viven cerca de los ríos crecidos y cancelar cientos de vuelos" (Associated Press, 9 de agosto del 2014).

Para el lunes, las autoridades ordenaron a más de 1,6 millones de personas a evacuar sus hogares y al menos diez personas habían muerto. Cientos de edificios fueron destruidos a medida que la tormenta se movía hacia el norte (Agence France Presse, 11 de agosto del 2014). À mediados de julio de este año otro súper tifón azotó las Filipinas y devastaron el sur de China, matando a 100 personas (CNN, 19 de julio del 2014). La temporada de tifones en el Pacífico está solo a mitad del período y amenaza con más devastaciones antes de que termine. Es trágico ver a todo el mundo sufrir de desastres naturales. Sin embargo Jesús advirtió que una de las "señales" del fin de esta era sería que "habrá terror… a causa del bramido del mar y de las olas" (Lucas 21:11, 25). Según las Escrituras, conforme nos acercamos al fin de esta era, cada vez serán más comunes las destructivas tormentas. Tenemos que velar, y que estas catástrofes nos motiven a orar con más fervor: "Venga tu reino" (Mateo 6:10). Para más información sobre el "fin de esta era", lea nuestro folleto, Catorce señales que anuncian el retorno de Cristo.